¿Qué ocurre cuando estás más tiempo en el trabajo que vivendo? la respuesta es como la del color del caballo de Santiago o la de la navaja de Ockam: que no vives, que sólo trabajas. Es preocupante como tu memoria de repente se parte en dos: el 90% está dedicada a tu vida laboral y es de elefante, que no te deja ni durmiendo, y el otro 10% es maltrecha memoria de pez, que dura dos minutos, y no te permite recordar el cumpleaños de tu madre, por ejemplo. Al final, mucho me temo que la solución de la tensión laboral de hoy en día pasa por un año sabático... pero claro, si te metes en una hipoteca...a ver quien es el listo que se atreve a dejar todo y lanzarse a la aventura, jeje. Me temo que soy víctima del estrés y de la mala vida laboral...en mi casa, me miran de reojo cuando llego, creo que no se acuerdan de mi.... y echo de menos mirar en un frío riachuelo de montaña y ver las pequeñas piedras dentro del agua... siempre están ahí, les da igual todo...¡vaya! buscando piedras en el río, he encontrado Río Piedras, en Puerto Rico... qué sitio tan bonito para escaparse bien acompañado ^_^ ... En fin, ¡os dejo por hoy!